La historia de Louis Vuitton

Louis Vuitton no es de esas marcas gestadas por magnates afortunados, está es la historia de un emprendedor audaz y visionario.

Louis Vuitton nació en 18821 en una aldea francesa ubicada en los límites con Suiza en una familia trabajadora pero humilde que se dedicaba a labores enfocados al manejo de la madera. A los 16 años decide emprender un viaje de casi 400 kilómetros a pie hasta París, lo motivaba su anhelo de buscar mayores oportunidades para salir adelante.

Los objetos de los viajeros en esos años sufrían daños y averías porque los medios de transporte más comunes de la época eran carrozas, trenes y barcos, por lo que los artesanos de madera eran bien solicitados. Su epifanía fue desarrollar durante 17 años distintas clases de maletas con estilo único y de alta calidad para viajeros que le permitió abrir su propia tienda cerca de la Place Vendôme.

En 1859 se abre el “Atelier” que era el taller donde se labraban a mano los bolsos y maletas diseñadas por Louis y que al mismo tiempo se convirtió en la casa de su familia, pues al lado del taller se forjaron gran parte de la familia Vuitton durante su estadía en Paris.

Otro hito importante en la historia de esta marca fue el desarrollo de la cerradura Tumbler, pues las maletas de los viajeros incluían objetos de alto valor los cuales al no tener una herramienta de seguridad para su manipulación eran muy susceptibles de caer en manos de los dueños de lo ajeno, es por esto que en 1886 Louis en compañía de su hijo Georges desarrollaron y patentaron un sistema de cierre único con dos hebillas de resorte.

Su hijo Georges también fue clave en la evolución de la marca, pues en 1896 diseñó la lona monogram que conocemos hoy por hoy con la cual buscada diferenciarse de otras marcas. Su inspiración fueron distintos emblemas japoneses creando varias formas de pétalos alrededor de distintas figuras como círculos e incluyendo las iniciales entrelazadas de su padre ya fallecido para esa época. Un año más tarde se patenta la lona y en 1905 se registra como marca. En 1936 George fallece y la empresa queda a cargo de su hijo Gaston quién se enfocó en desarrollar productos con nuevas materias primas que trabajaran la impermeabilidad de los bolsos e incursionar la búsqueda de nuevos mercados como el asiático donde llegó en 1978.

La insignia representativa de la marca, emblema de lujo alrededor del planeta, fue diseñada por su hijo Georges Vuitton en 1896, quién influenciado por la fiebre de lo exótico e inspirado en diversos emblemas japoneses creo “La lona monogram”, un patrón de cuadrifolios y flores que incluyen las iniciales entrelazadas de su padre ya fallecido para esa época. Un año más tarde se patenta la lona y en 1905 se registra como marca, para evitar imitaciones el estampado a sido empleado en todo tipo de complementos y es una marca insigne.

En los años 80´s el magnate Bernard Arnault compró los diseños de la familia Vuitton y creó los cimientos para los que sería el grupo de marca de lujos Louis Voitton Moët Henessy. Para crear más vinculación con las nuevas generaciones en los años 90´s nuevos diseñadores actualizaron la marca que está fuertemente posicionada como la marca elite de accesorios y bolsos para viajes. Es el principal patrocinador de la Copa América desde hace 30 años y posee 445 tiendas en 62 países.

La marca lanza su nueva campaña “Una celebración del Monogram”, mostrando que la marca permanece con audacia e irreverencia ligada a la tradición sublime de la artesanía.